BUENOS AIRES.- De todo y para todos. La escalada de violencia pareciera no tener fin en el fútbol argentino. A la siesta, el hallazgo del cuerpo de un barra de Vélez en el estadio, conmocionó a todos. Al poco tiempo, simpatizantes de Independiente amenazaron de muerte a los jugadores del equipo cuando finalizaron la práctica. "Si nos vamos a la 'B' los matamos a todos", fue la frase más dura que debió escuchar Luciano Leguizamón.
El técnico Américo Gallego, para preservar a sus jugadores, decidió entrenar en el predio que AFA tiene en Ezeiza. Sin embargo, un grupo de barras se acercó hasta ese lugar para insultar al plantel y al cuerpo técnico horas antes de que el equipo reciba mañana a Unión en un duelo clave por mantener la categoría.
A la siesta, el mundo futbolístico se convulsionó al haberse confirmado que hallaron el cuerpo de un hombre bajo las tribunas del estadio, en el taller de herrería. Después se confirmó que se trataba de Diego Bogado, de 35 años, integrante de La Pandilla de Liniers, una de las facciones de la barra del club.
En un comunicado de prensa, los directivos del club, aclararon que no se trataba de un socio y ni de un empleado, y que fue encontrado envuelto en una bandera de Vélez y sin signos de violencia. "Ellos se harán los boludos", aseguró Pablo, hermano de la víctima. (Télam y DyN)